Faja Sacrolumbar Alta Lumbitron Elite Duo LTG-305

Descripción

FAJA SACROLUMBAR ALTA LUMBITRON ELITE DUO

INSTRUCCIONES DE COLOCACIÓN:

Para obtener el mayor grado de eficacia terapéutica  y prolongar la vida útil del producto, es fundamental la elección correcta de la talla más adecuada a cada paciente o usuario. Una compresión excesiva puede producir intolerancia, por lo que aconsejamos regular la compresión hasta un grado firme, pero cómodo. En caso de que el producto necesite adaptación, ésta se tiene que llevar a cabo por un técnico ortopédico o un profesional sanitario legalmente capacitado para ello.

Para la colocación de la faja sacrolumbar deben observarse los siguientes aspectos:

Colocación faja:

1. Colocar la ortesis alrededor del cuerpo de manera que las ballenas queden en el centro de la espalda.
2. Introducir los dedos en los correspondientes pasadores de mano de la parte derecha e izquierda del cierre.
3. Presionar el lado izquierdo del cierre sobre el vientre y tirar del lado derecho hasta que se pueda cerrar el micro gancho.

Colocación de la banda:

1. Situé la placa central posterior centrándola sobre las ballenas situadas en la cara posterior de la faja.
2. Una vez fijada mediante microgancho, introduzca los dedos en cada extremo de las bandas elásticas.
3. Traccione tanto como fuera necesario y fíjelo sobre el velour de la zona abdominal mediante microgancho.

Posición de la Faja:

Para lograr un efecto óptimo, es esencial que la faja abarque parte de la zona pélvica y sacra, ya que esta área más rígida proporciona un soporte crucial a la región lumbar. Para verificar si la faja está correctamente colocada, puedes sentarte y asegurarte de que el borde inferior de la faja se encuentre a aproximadamente uno o dos dedos por encima de la superficie en la que te has sentado.

Mantenimiento de la faja Sacrolumbar

Lave la prenda a mano utilizando agua tibia y jabón neutro (a una temperatura máxima de 30º). Después, permita que la prenda se seque a temperatura ambiente. Evite el uso de blanqueadores o detergentes abrasivos, así como colgarla o plancharla. No exponga la prenda a fuentes de calor directo.